5.11.11

Muerte de una estrella




Un solo átomo de hierro.

No hay regreso una vez traspasado
ese horizonte.
El astro fabrica en su interior
el único veneno
en un intento voraz por respirar.

No existe antídoto.

El microscópico mineral crece y,
en segundos,
desencadena la muerte de la estrella.

28.3.11

Abrerón


Podría haber pasado toda mi vida mirando al cielo, buscando una estrella que hablara el único idioma que reconozco. Podría haber extraviado mi cordura tratando de hallar la luz en algún rincón del Universo sin dejar de dar vueltas en círculo por el borde del laberinto que separa lo posible de lo imposible. Podría creer que existe, sentir que existe, soñar que existe...

... pero ahora sé que existe.

Tiene su nombre (el mío, el nuestro) iluminando el rincón donde me habitas; tiene la certeza de la luz, inconfundible olor de madrugada; única estrella que me guía, aún sin verla, através de lo que soy y lo que exudo. Navegando hacia ella, se arriba en mí, coordenada precisa.

La luz está en mí, si me pierdo tendré dos estrellas con las que guiarme...

8.12.10

8 de diciembre del 2010




No queda otra que aceptar que uno no tiene la última decisión; aún poniendo el máximo empeño en ir a 2 revoluciones, el mundo te marca 200 y no hay nada que hacer salvo seguirlas con la lengua fuera y amoldarte, no sin sobresaltos, a estar en medio cuando la intención siempre fue protegerse bajo el cobijo que ofrecen las sombras. El mundo gira y, sin preguntar, te coloca donde no imaginabas; sólo queda cerrar los ojos más de lo esperado, no para no ver, si no para que no te vean o, más aún, para no ver que te ven.

Tras un año (más cuatro) yo no merecía un aviso ni una llamada, no merecía ni la decisión ni la intención, nada. Aún así, quise estar donde sentía que debía para, de alguna forma, dotar, a mi manera, de coherencia al paso natural de las cosas. Pero está claro: pocas cosas hay más volubles que el pasar de sí mismas, el pasear del tiempo no siempre tiene lógica y, a veces, te abandona a tu suerte en un lugar que tú mismo has creado pero no has sabido controlar.

Finalmente, salir corriendo como quien busca la puerta trasera de un sueño al que es consciente que no ha sido invitada. Más fotofobia de la habitual porque al despertar seré consciente de que aún no soy capaz de distinguir la luz del sol de la que se escapa, moribunda, del flexo de mi mesilla de noche.

9.3.10

Compás de espera



Entrar fue fácil.
...
No había olvidado ningún detalle. Sabía lo que necesitaba: agua, hilo de colores, luz y algún botón que permitiera dejar entornada el alma. Se paró a un lado del camino y, sentada sobre la hierba, empezó a coser lentamente tal y como iba sintiendo que debía hacerlo. Fue anudando las letras y los silencios, colocando en su lugar correcto cada acento, buscando la entonación justa. Tenía que ser esa palabra, y no otra, el resultado. Cualquier otra palabra no serviría para nada. Tenía que ser esa la que apareciera al otro lado de las costuras… Ignoraba cuál, y cosía a ciegas, tanteando los bordes de las letras, cada arista del silencio.
...

el tiempo abre puertas
donde antes no había
nada.

16.12.09

¿A dónde vamos cuando venimos?

No importan las horas de vigilia cuando el destino es caer rendidos de sueño, ni importa de qué lado cae la moneda si no nos queda aire suficiente para recogerla del suelo y seguir.

El último espejismo es la teoría de que debemos caminar hacia algún lugar o no vamos a ninguna parte. El movimiento es una ilusión, un juego de magia en el que perdemos contacto y caemos vaciándonos de todas las preposiciones propias y ajenas. Lo único cierto es lo que acontece al otro lado de mis vísceras y su pálpito: ajetreo de mercadillo, estación de metro en hora punta, regateo de dolor y descendencia, por si acaso hubiera algo que no estuviera premeditado. Y nunca se detienen.

Violados por los tiempos verbales y su estrategia de composición de lo inmaterial. Vencidos. No hay brújula que oriente los pasos que se pierden a conciencia.


[... Todavía hay nudos que desenredar
todavía hay caminos abiertos
al lugar al que traté de regresar...
Si volviera a vivir, si volviera a caer
si volviera a creer en ello
apostarías a impar...
Está borrándose en el tiempo
como la huella de un explorador,
no supe descifrar tus sueños
deslumbrado por un halo de luz.
Siempre tiramos de lo que perdemos,
siempre perdemos lo que más queremos...

Quique González dixit.]


21.8.09

Looking for sense



Perdida en mi propia teoría. Somos fuertes sólo cuando los hechos nos dan la razón.
La valentía está en lograr demostrar que, aunque no siempre aciertes, estás en lo cierto.
No siempre nos conviene la respuesta pero no dejamos de interrogarnos una y otra vez (quizás por toda respuesta buscamos la calma de saber que podemos ignorar impunemente las respuestas que no nos convengan).

No puedo cerrar los ojos sin sentir que todo lo que necesito saber está ante mis ojos, y no lo veo. No lo veo. No porque tenga los ojos cerrados, sino porque no tengo ojos. Esta vez no. Me fuerzo a mirar con la boca o con las manos, arañar una parte de la visión que permanece en mi retina una vez que se desvanece la luz de los fuegos artificiales.

Si todo tiene sentido, necesito encontrar el de esto.
Si todo no tiene sentido, estaré perdida en mi propia teoría…

17.8.09

Antagonia



El rayo trae la tormenta y la luz.

Y el silencio,
que precede y que sigue,

también lo trae el rayo...